Psicología Holística

El Asesoramiento Psicológico en Relaciones Familiares de La Psicóloga Marilyn Giron Gamarra está basado en la Psicología Holística.

La Psicología Holística es un enfoque de la psicología que comprende al ser humano como un todo-unificado integrando cuerpo, mente y espíritu. Las personas deben entenderse como totalidades biológicas, psicológicas y socioculturales que no pueden ser completamente comprendidas y explicadas en términos de componentes o características aisladas (APA, 2007). La Psicología Holística también sostiene que los aspectos psicológicos deben ser estudiados de forma global, debido a que un análisis o comprensión de las partes no proporciona una comprensión del todo.  «El todo es más que la suma de las partes» (Teoría de la Gestalt). A partir de la jerarquía motivacional de Maslow (Psicología Humanista) se destaca la importancia de incluir la experiencia subjetiva de la vivencia humana. Cada persona es un sujeto singular que necesita llegar a ser aquello que ansía, y encontrar lo que da sentido a su vida y vivirlo. Se trata de un proceso interno de gratificación que proviene de la realización de objetivos que la persona se había propuesto. Se expresa en obras que reflejan los ideales y valores más altos de la persona. Sin esta percepción subjetiva de la experiencia, no podría comprenderse el concepto de Maslow, una jerarquía de necesidades que motivan a todos los individuos, de forma que, sólo cuando las necesidades básicas de una persona son satisfechas puede ocurrir la autorrealización, el objetivo final del ser humano. La Psicología Holística tiene en cuenta todas las dimensiones implicadas en la experiencia humana: física, mental, emocional, intelectual, social, sentimental y espiritual. Además, las considera integradas, inseparables y relacionadas entre sí. De forma que, lo que le sucede a una persona a nivel físico, por ejemplo, le afecta también a nivel emocional y al contrario.

La Psicología Holística no es una orientación psicológica específica, esta perspectiva se caracteriza por presentar cierto grado de eclecticismo, al confluir aportaciones de diferentes teorías, metodologías y prácticas de distintas corrientes o movimientos como, por ejemplo, la Psicología Humanista, la Terapia Centrada en el Cliente, Consejería Multicultural, o Curación Espiritual, entre otras.

La Psicología Humanista hace un énfasis en la capacidad de las personas para tomar sus propias decisiones, elegir su propia manera de vivir y actualizar estas decisiones, regulando así las consecuencias que obtienen en cada momento de su vida. El significado de las experiencias vividas es la clave para guiar el camino (APA, 2007). La Psicología Humanista sostiene que:

• Una persona es más que la suma de partes, características o fragmentos, es un todo indivisible en relación con el ambiente (Perspectiva Holística)
• El individuo construye su propia existencia en un contexto humano.
• El ser humano es un ser consciente con capacidad de decidir sobre su propia vida.
• Es imprescindible centrarse en la persona, su experiencia interior, el significado que la persona da a sus experiencias.
• Se han de enfatizar las características distintivas y específicamente humanas: decisión, creatividad, autorrealización, etc.
• Es importante mantener el criterio de significación intrínseca en la selección de problemas a investigar, en contra de un valor inspirado únicamente en el valor de la objetividad.
• El compromiso con el valor de la dignidad humana e interés en el desarrollo pleno del potencial inherente a cada persona.
• Es central la persona tal como se descubre a sí misma y en relación con las restantes personas y grupos sociales.

La Terapia Centrada en el Cliente de Rogers consiste en una secuencia ordenada de autodescubrimiento y actualización de decisiones por parte del cliente que surge a partir de la comprensión empática, la aceptación y el respeto del psicólogo por el marco de referencia del cliente. El psicólogo genera un ambiente cálido, de aceptación y valoración, que permite el crecimiento de la persona reflejando y aclarando las ideas del cliente, que consigue verse a sí mismo de forma más clara y encontrarse cada vez más profundamente con su verdadero yo. Conforme se lleva a cabo el proceso psicológico, el cliente resuelve conflictos, reordena principios y valores, redirige perspectivas de la vida, y aprende a interpretar sus pensamientos y sentimientos, cambiando, a consecuencia de esto, el comportamiento que a su entender le provoca problemas. Según Rogers el amor y el afecto espontáneos de un padre o cuidador dados sin condiciones, es una necesidad universal en la infancia y un requisito previo para un desarrollo saludable. Este afecto es internalizado por el niño y contribuye al desarrollo y da sentido duradero de autoestima. La consideración positiva incondicional no implica permisibilidad, la desaprobación de tipos específicos de comportamiento puede expresarse sin retirar el amor o inducir sentimientos de indignidad. Para Rogers, un niño que considera que el amor y el respeto están condicionados a la aprobación de los padres, también cree que ser digno de amor se basa en la aprobación de los demás y a medida que la persona crece, puede seguir sintiéndose digno de afecto y respeto sólo cuando expresa comportamientos deseables por las demás personas (APA, 2007). Siente la necesidad de «dar la talla» según las expectativas de otras personas. De modo que estos comportamientos no están dirigidos por el sujeto quien debería ser el que decida, controle y regule su propio comportamiento. 

Para fundamentar el verdadero valor que tiene el sujeto como persona, y el amor y el afecto que merece sin condiciones, es necesario recurrir a las principales Tradiciones Espirituales y de Sabiduría, que durante milenios, han aportado importantes conocimientos reconociendo una forma de Psicología Holística que permite reunir los fundamentos, temas esenciales y principios prácticos de la Psicología Holística, proporcionando una alternativa a la Psicología Científica moderna centrada en la economía y la política de la profesión. La Psicología Holística permite hacer un énfasis especial en la dimensión Espiritual de la persona, al contrario que la psicología científica tradicional que no considera esta dimensión. En Psicología Holística, el fundamento teórico-práctico de lo espiritual y su valor está basado en el conocimiento que encontramos sobre espiritualidad en las religiones (Edwards, 2013). De entre las diversas religiones que existen para fundamentar y abordar lo espiritual y su valor en Psicología Holística, el Asesoramiento de Marilyn Giron Gamarra está basado en el Cristianismo, concretamente de la denominación Adventista del Séptimo Día.

Referencias:

American Psychological Association [APA]. (2007). APA Dictionary of Psychology. Editorial American Psychological Association.  

Edwards, S. (2013). Holistic Psychology: A Brief Primer. Journal of Psychology in Africa, 23(3), 531-538.